Las migraciones son un hecho fundamental e imprescindible
para el desarrollo de los países desde un punto de vista social, económico,
humano y cultural. Es un tema que interesa y también preocupa cada vez más a la
sociedad, sobre todo cuando se desconoce la historia de la humanidad; cuando se
desconocen los motivos por los cuales las personas migramos; cuando se
cierran"filas" y "fronteras" y se buscan justificaciones
para actuaciones inhumanas, como las que están padeciendo las personas
refugiadas con el trato que desde Europa les estamos dispensando. Y es que, la
propia naturaleza social de los seres humanos explica su afán por consolidar
núcleos humanos estables y homogéneos y la mirada al extraño o extraña, a quien
"viene de fuera", hay que "trabajarla" para que no sea de
soslayo y sí acogedora. Porque el concepto de integración, de convivencia, de
pensar en una noción de ciudadanía global, no es consustancial a la naturaleza
humana, sino que es producto de la civilización, de la cultura y de la
educación. Desde el momento en que una persona en su país de origen encuentra
serias dificultades para prosperar, vivir con dignidad o sobrevivir, por el
motivo que sea, pone la mirada en "tierras de esperanza" que le permitan
la mejora de sí misma y de su familia. Sin embargo, la resistencia de los
países, de los Estados, a permitir el tránsito de personas, de mano de obra
entre ellos, es decir, las transacciones laborales, ha provocado que las
migraciones hayan sido unos de los temas menos tratados al hablar de la
globalización, pensamiento concretado como la eliminación progresiva, en
ámbitos internacionales, de las barreras tecnológicas y legales al tráfico de
mercancías, servicios y capitales. Y si no, miren ustedes lo que se está
cociendo en torno al TTPI, Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos de
América y Europa.
En la actualidad, los movimientos migratorios han alcanzado
tal magnitud a nivel mundial que, además de imponerse una reflexión acerca de
las causas de la misma, se hace necesario que las sociedades de acogida
demuestren madurez respecto a su preparación como receptora de tantísimas
personas que se movilizan, viajan y se desarraigan en busca de un futuro mejor
o distinto al que tienen en su lugar de origen. De la misma forma que es
imprescindible conocer todo el entramado de recursos a los que las personas migradas
pueden acudir, como el caso del EDATI, el Equipo de Atención a Trabajadores
Inmigrantes de la Guardia Civil, los y las "trabajadores/as sociales de la
Guardia Civil".
Todo ello acompañado de excelente música de la que os dejo aquí los enlaces directos a los vídeos para que podáis escucharlas al completo.
"EL MOJADO"
(Ricardo Arjona)
"EL EMIGRANTE"
(Celtas Cortos)
Para escuchar el programa de radio, solo tendréis que pinchar en el siguiente enlace o en la columna de la derecha, en el ivoox de Clandestino.
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